Mi pelo volverá a crecer. Inundará las calles y tu almohada.
No volverá tu mano con misericordia a recorrer esta espalda entumecida, para posarse finalmente en mi cabeza indefensa y desnuda ante las miradas que recorren mi miedo. Será tu mano que deseosa revolverá mi pelo atrayéndome a tu boca y no el abrazo póstumo que me diste ayer...
Más acá, más allá, mi pelo volverá a crecer.
No volverá tu mano con misericordia a recorrer esta espalda entumecida, para posarse finalmente en mi cabeza indefensa y desnuda ante las miradas que recorren mi miedo. Será tu mano que deseosa revolverá mi pelo atrayéndome a tu boca y no el abrazo póstumo que me diste ayer...
Más acá, más allá, mi pelo volverá a crecer.
Rocío Tábora
(de Guardarropa)
(de Guardarropa)