viernes, 21 de agosto de 2009

Un par de reflexiones sobre el ritmo

El estilo es un asunto sencillo; todo es ritmo. En cuanto lo comprendes, no puedes equivocarte de palabras. Aunque por otra parte aquí estoy, después de media mañana, llena de ideas y de visiones y de cosas así, pero incapaz de verterlas por falta de ritmo adecuado. Esto sobre la esencia del ritmo es muy profundo y va mucho más allá de las palabras. Una visión, una emoción, crean esta ola en la cabeza mucho antes de que surjan las palabras apropiadas. Y al escribir (esto es lo que creo ahora) una tiene que recapturar esto y asentar este funcionamiento (que aparentemente nada tiene que ver con las palabras), de modo que después, cuando se fragmenta y rueda por la cabeza, crea las palabras adecuadas.


Virginia Woolf
(Carta a Vita, 16 de marzo de 1926)

lunes, 10 de agosto de 2009

Un poema de Leonel Rugama



LA TIERRA ES UN SATÉLITE DE LA LUNA

El apolo 2 costó más que el apolo 1
el apolo 1 costó bastante.
El apolo 3 costó más que el apolo 2
el apolo 2 costó más que el apolo 1
el apolo 1 costó bastante.

El apolo 4 costó más que el apolo 3
el apolo 3 costó más que el apolo 2
el apolo 2 costó más que el apolo 1
el apolo 1 costó bastante.

El apolo 8 costó un montón, pero no se sintió
porque los astronautas eran protestantes
y desde la luna leyeron la Biblia,
maravillando y alegrando a todos los cristianos
y a la venida el papa Paulo VI les dio la bendición.

El apolo 9 costó más que todos juntos
junto con el apolo 1 que costó bastante.

Los bisabuelos de la gente de Acahualinca
tenían menos hambre que los abuelos.
Los bisabuelos se murieron de hambre.
Los abuelos de la gente de Acahualinca
tenían menos hambre que los padres.
Los abuelos murieron de hambre.
Los padres de la gente de Acahualinca
tenían menos hambre que los hijos de la gente de allí.
Los padres se murieron de hambre.
La gente de Acahualinca
tiene menos hambre que los hijos de la gente de allí.
Los hijos de la gente de Acahualinca no nacen por hambre,
y tienen hambre de nacer, para morirse de hambre.
Bienaventurados los pobres, porque de ellos será la luna.